Hay que saber bien los objetivos y diferencias de cada proceso antes de secar y curar la marihuana.
El procesamiento de la marihuana implica la evaporación de parte del agua en la estructura del cogollo, además de perder humedad, los cogollos también pierden algo de clorofila (esto hará que sepa y huela mejor), y sucederán las reacciones de maduración de los cannabinoides, aceites y terpenos.
Cuáles son las mejores condiciones para el secado de tus plantas
Para que tus cogollos tengan un buen aroma, sabor y efecto, es primordial realizar un buen secado de tus plantas. Para ello es importante:
- Las flores no pueden estar en contacto con la luz durante el secado.
- Los primeros siete días, la humedad relativa tiene que estar entre un 60% y un 65%. Para bajar la humedad se puede utilizar un extractor de aire con filtro de carbón activo, esto hará que extraiga el aire húmedo.
- Temperatura entre 15 y 18 grados. También es importante evitar los cambios bruscos de temperatura.
- Renovación diaria del aire.
- Si aceleras el proceso, se puede perder la calidad de las propiedades antes mencionadas, por lo que no se deben usar deshumificadores o ventiladores para el secado.
- No se debe perder más del 70% de la humedad.
Aprende cuando tus cogollos están lo suficientemente secos
El secado de los cogollos ocurre del exterior al interior, por lo que por fuera estarán más secos que por dentro. Para saber si están listos para curar hay que tener en cuenta:
- Secado de al menos 10-15 días para obtener una buena calidad.
- Cuando estén secos por fuera pero no se desmigajen al apretarlos, sabrás que están prácticamente listos.
- Si al doblar una rama cruje o se dobla, es porque están suficientemente seco.
Pasos para secar tus plantas
Según el cuarto de secado, podrás elegir uno de los métodos que a continuación te explicamos:
Cortar y colgar las plantas: se corta por la parte inferior del tallo principal y se cuelga boca abajo o si lo prefieres, se puede colgar por ramas si la planta es muy grande. Así el secado es homogéneo y natural.
Uso de secaderos: lo primero que debes hacer es separar los cogollos de las ramas y esparcirlos para que no haya ningún tipo de contacto entre ellos sobre los pisos de los secadores, una vez realizado, podrás usar secadores verticales o secadores apilables, así se ahorra espacio. Los cogollos al estar en contacto con una superficie, pueden aplastarse, por lo que se recomienda ir girando los cogollos cada 2 o 3 días.
Secado excesivo de tus cogollos
El desmigaje de los cogollos es un signo de que están demasiado secos, para mejorar la textura y el sabor puedes aportarle humedad (nunca mojándolos directamente), pero no tendrán la misma calidad que si realizas un buen secado.
Para aumentar la humedad, normalmente se usan cajas de curado con controlador de humedad. Otros métodos son humedecer un trozo de cerámica e introducirlo en la caja de curado.
Curación de los tus cogollos
Este proceso es por el cual se pierde el resto del agua estructural de los cogollos hasta que se queda el 25%-30% de humedad. También ocurren las reacciones de maduración de los cannabinoides y terpenos y la descomposición de la clorofila que es la que hace que los cogollos tengan un toque rasposo y sabor a yerba fresca. La cura es imprescindible para que tenga un buen aroma y sabor.
El proceso de curación puede durar de tres semanas a un mes aproximadamente, dependiendo de la humedad, temperatura...
En este tiempo se descarga la mayoría de la clorofila y un alto porcentaje de THC deja el estado ácido (THC-A) para convertirse en psicoactivo (THC).
Lo mejor para este proceso es utilizar cajas de madera (sin tratamientos de ceras o barnices) ya que tiene la capacidad de ceder y absorber la humedad, o botes herméticos y opacos que ayudan a retener mejor el aroma. Desde nuestra experiencia lo mejor es curarlos en cajas de madera y después conservarlos en botes herméticos de plástico o cristal.
Las primeras semanas se deberá abrir la caja, bote o bolsa para dejar salir el aire húmedo ya que las primeras semanas los cogollos siguen soltando humedad. Este proceso debes realizarlo una vez al día la primera semana, una vez cada tres días la segunda semana y una vez a la semana a partir de la tercera semana.
Almacenamiento y conservación de tu marihuana
Los cogollos se deben mantener preferiblemente en un recipiente hermético y opaco como botes de vidrio, aunque también se utilizan botes de conservación al vacío, bolsas anti-olor o bolsas gofradas para envase al vacío.
Es muy importante que los cogollos no estén en contacto con la luz ni exponerlos a cambios grandes de temperatura o humedad.
Nuestros consejos
- Tener un buen lugar donde secar y curar tus plantas para evitar los cambios de temperatura y humedad, así obtendrás la mejor calidad de tus cogollos.
- Esperar el suficiente tiempo de curación antes de su consumo, así podrás sacarle el máximo potencial en aroma, efecto y sabor.
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